Grupo de cuidados

01/12/2019

En estos tiempos de turbocapitalismo, partidos con nombre de diccionario que siguen estrategias de comunicación de Trump (esperemos que no resultado diferente), de condiciones laborales ínfimas y postureo digital he descubierto un pequeño rayo de sol, una resistencia de lo más encantadora: son los grupos de cuidados. 

La idea es tan sencilla que resulta fascinante: es tan simple como juntar un grupo de gente para ayudarse. La sororidad puede tener forma de chat, de grupo que se reúne periódicamente o cualquier formato que se quiera y los beneficios son increíbles. 

Hay quien opina que tener un sitio donde llorar las penas es una estupidez, pero por experiencia les digo que sacar lo que una lleva dentro es vital para avanzar; y sentirte apoyada por un grupo de personas desata un potencial único sobre todo para las mujeres que estamos muy acostumbradas a estar ninguneadas y a que no se tomen en serio sus iniciativas. 

En un grupo de cuidados se pueden compartir proyectos, currículums, problemas, alegrías… Los hay temáticos y suelen estar muy relacionados con el feminismo, yo estoy encantada con haberlos descubierto porque cuando una salta al vacío a diario es mucho más fácil con una red debajo.

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